El relevamiento indicó que Brasil alcanzó más de 80 puntos sobre 100 en categorías como clima, paisaje y diversión, para actividades como buceo, escalada, parapente, rafting, rappel, senderismo y piragüismo, entre otras actividades.
Según estadísticas del gobierno brasileño, el ecoturismo y el turismo de aventura son el segundo factor de atracción de visitantes extranjeros que tiene Brasil, después del segmento de sol y playa. A continuación algunos de los mejores destinos de turismo de aventura del país.
Brotas, Sao Pablo
Situada a unos 240 km de São Paulo, este municipio está considerado la capital del turismo de aventura de Brasil. La variedad de excursiones y atracciones son innumerables, entre los que se encuentran el rafting, la tirolesa, la escalada de árboles y los deportes acuáticos. Y para relajarse después de tanta acción, Brotas tiene casi 80 cascadas de agua dulce para elegir.
Boituva, Sao Pablo
La ciudad de Boituva está en la región de Sorocaba, a unos 120 km de la capital paulistana y cuenta con una gama de opciones y servicios para turistas que incluyen salto en paracaídas para amateurs y vuelos en globo aerostático con vista hacia colinas verdes y lagos hermosos.
Chapada Diamantina, Bahía
Ideal para los amantes del senderismo, este Parque Nacional ubicado a 300 km de Salvador es un paraíso natural pleno de historia: los recorridos más populares están en el Valle del Pati. Pero además de senderismo y trekking, en esa reserva natural es posible realizar otras actividades como escalada, rapel o tirolesa.
Arraial do Cabo, Río de Janeiro
Conocida por su belleza natural, Arraial do Cabo, situada a 160 km de la ciudad de Río de Janeiro, deslumbra por sus playas de arena blanca, aguas transparentes y abundante vida marina. Conocida como la “Capital del Buceo” del país, es un destino seguro para los amantes de esa disciplina y para aquellos que quieren estrenarse en ella.
Bonito, Mato Grosso do Sul
Bucear entre cardúmenes de peces, hacer senderismo, observar animales en su hábitat natural, descender en rappel por una cueva, montar a caballo, bañarse en cascadas y admirar paisajes increíbles son algunas de las actividades que se pueden hacer en la esa reserva natural. Sólo 200 kilómetros separan la capital del estado, Campo Grande, de este refugio ecológico.
Jalapão, Tocantins
Esta espléndida reserva ofrece a los viajeros ríos de aguas transparentes y deliciosas; cascadas, como la Cachoeira da Velha y la Cachoeira do Formiga; el raro fenómeno de los fervedouros (donde los manantiales profundos se transforman en oasis que permiten flotar sin esfuerzo); un conjunto de dunas doradas perfectas para contemplar las puestas de sol y formaciones rocosas que parecen hechas en papel, de tan perfectamente diseñadas por la naturaleza, como la Serra do Espírito Santo y la Pedra Furada.
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